ÍKARI:
Contrabandista eskimal cuya base se encuentra en el satélite Lerreke. Es hijo de Ígori, fundador de las bases en las que su hijo opera, tanto la del satélite como la del polo Norte de Astoon. Luce un tatuaje en la frente, que es algo que les hacen a todos los eskimales en sus primeras jornadas de vida; en el caso de Íkari se trata de 6 puntos ordenados en dos columnas de 3. Es un tipo de apariencia seria, que destaca por su altura, rapidez y agilidad, y que gusta de llevar siempre pendientes grandes en sus orejas. La totalidad de sus negocios en Astoon los lleva con los hermanos Hurr y Rúpurac, pero trabaja con mucha más gente, la mayoría del resto de planetas, con los que intercambia mercancía de contrabando, drogas e información valiosa. Cuando Rúpurac le comenta sus conversaciones con los invasores, sobre todo con Mortimor, le deja realmente intrigado. Pero es finalmente Hurr el que logra convencerlo de que unirse es lo mejor para todos, dejándole caer que podría ocupar el puesto de alguno de los gangx que decidieron salirse de la alianza. Su primera misión consiste en retener a varios prisioneros importantes que tiene Rúpurac en la “Viuda Negra”, aunque nunca se imagina el nivel de importancia que tienen.
Es un gran seguidor del razorball, sobre todo de los Olaine Garrakas de su amigo Another, incluso sueña con tener algún día un equipo en el satélite Lerreke. Además es una persona con gran habilidad para la enseñanza, aspecto que comparte con varios de los semejantes que trabajan junto a él, por eso tienen en las dos bases contrabandistas diferentes especies incivilizadas que han logrado que dejaran de serlo.
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